MarFood, la unión entre Foodcorp Chile y Alimar (Alimentos Marinos), dio por concluidas sus actividades comerciales el 31 de diciembre de 2015. Ambas compañías decidieron operar por separado. Siendo dos de las empresas pesqueras más importantes y antiguas de Chile el acuerdo habría nacido de la necesidad de concentrar recursos, tanto económicos como humanos, de cara a la reducción de las cuotas de pesca en las zonas pelágicas chilenas. Esto sucede en el ambiente de discusión y ajustes actual, consecuencia de la aplicación de la Ley de Pesca, que aunque ha sido recibida con entusiasmo en el sector, reduce las cuotas de pesca a las empresas basados en criterios científicos de conservación y no comerciales.
A pesar de que Foodcorp y Alimar son dos empresas bien establecidas y de tradición se enfrentan a las dificultades producidas por la reducción de cuotas de pesca de jurel, en un intento del gobierno chileno por recuperar la biomasa. Estas cuotas se han reducido de 310.000 toneladas métricas en 2014 a 297.000 en 2015. La tendencia en estas cuotas continúa a la baja. Aunque sólo Foodcorp posee cerca del 9% de la cuota de pesca de jurel al sur del país esta ha resultado insuficiente para sus proyectos en crecimiento y su nueva dinámica de negocios: manufacturar productos pesqueros para mercados alternativos.
Aparte los controles sobre cuotas de importación de peces y productos pelágicos de África y el control sobre la exportación de calamar gigante en Asia, complicaron la producción y relaciones comerciales. Estas y otras circunstancias, como la prohibición de importar productos pelágicos congelados para consumo humano en Nigeria, dieron lugar a pérdidas de cuotas de mercado. Para sortear la situación la compañía, que nació en 2012, se vio obligada a migrar a otros mercados, como el peruano, pero los resultados fueron mixtos. Consideremos que Foodcorp, por sí sola, vio reducidos sus ingresos de 501 millones de dólares en 2014 a 490 millones en 2015.
MarFood se vio envuelta en el escándalo de las 11.000 toneladas de harina de pescado incautadas a 8 empresas pesqueras a finales del año pasado. Esta se realizó por no la no declaración del origen de la materia prima para elaborar esta harina, sumando más a la polémica por el supuesto incumplimiento de algunas compañías de las cuotas establecidas por la nueva ley.
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