La adopción de un plan para reducir la capacidad de la flota atunera que pesca en el océano Pacífico oriental impulsará la delegación del Ecuador en la próxima reunión de la Comisión Interamericana del Atún Tropical (CIAT) que se celebrará en San Diego, California, del 16 al 30 de agosto próximo.
Así lo revela Guillermo Morán, gerente de Tunacons, quien participará en la reunión de la CIAT como parte de la delegación del sector empresarial atunero que acompañará a las autoridades del sector pesquero ecuatoriano.
Explicó que primeramente se respaldará que se mantengan las mismas medidas que ya fueron adoptadas por la CIAT el año pasado y que están relacionadas con las vedas del atún y el uso de los plantados, contenidas en la resolución C-17-02, que rigen hasta el año 2020.
Impulsar plan de gestión
La posición del Ecuador es la de impulsar en el grupo de trabajo de capacidad un plan de gestión, dice Morán y explica que esto el país ya lo ha venido proponiendo desde hace dos años y producto de ello la CIAT contrató dos consultores, dos especialistas, que se encuentran trabajando en el diseño de este plan de gestión que nos dé diversas alternativas de cómo reducir la capacidad de la flota, a fin de que este exceso de capacidad no cause a futuro posibles daños en las poblaciones de atunes y por ende en la industria atunera de la región y particularmente de nuestro país.
Subraya que es necesario contar pronto con un plan de gestión porque a medida que se aumenta la capacidad de la flota vamos a tener mayores esfuerzos de pesca. Sabemos que los stocks de las poblaciones de atunes, sobre todo de aleta amarilla y patudo, están en su máximo rendimiento sostenible y si bien no están sobreexplotadas, están cerca del límite, por lo que debemos controlarlo con un plan de gestión que acordemos entre todos los países de la CIAT.
No más días de veda
Morán destaca que básicamente lo que se busca es que se tome una decisión en la Comisión que nos ayude a controlar que no exista un exceso que nos pudiera llevar a una sobreexplotación de los recursos, lo cual afectaría a la industria.
Una sobreexplotación de los recursos definitivamente tiene un impacto directo en la operación de la industria, de los barcos, del procesamiento y de las exportaciones.
“Si no se controla la capacidad, los científicos siempre nos van a recomendar nuevas medidas adicionales, esto es más días de veda, ya estamos por 72 días, recordemos que en el 2007 y 2008 eran solo 42 y hoy estamos casi en el doble, e inclusive hay recomendaciones de llegar hasta 90 días de veda y no todos los barcos pueden trabajar rentablemente cuando tienes que parar obligatoriamente 90 días”, advierte.
Por eso es necesario que desde ahora comencemos a controlar o a manejar adecuadamente la capacidad a través de un plan de gestión que es lo que el Ecuador ha venido impulsando dentro de la CIAT.
Reducir capacidad
En esta reunión vamos a revisar y apoyar que exista un plan de gestión, obviamente discutido con todos los países, con miras a lograr una reducción o limitación de la capacidad de la flota.
Morán explica que hay dos ideas que están planteando los consultores, una es cómo puede limitar la capacidad para que no siga aumentando; o, que esa capacidad que existe y que puede aumentar no afecte las poblaciones a través de una reducción del esfuerzo de pesca o medidas alternativas a las vedas que nos ayuden a reducir el esfuerzo de pesca.
Agrega que dentro de este plan se pueden contemplar incentivos para una reducción de la capacidad de flota en toda la región, no solo en Ecuador, mediante mecanismos financieros que lleven a algunos barcos a posiblemente reducir su capacidad.
Evitar impactos en industria
Nosotros lo que estamos diciendo como Ecuador es que hay que tener mucho cuidado con el crecimiento de la capacidad de flota para evitar mayores impactos en la operación de la pesca, porque esto puede generar también riesgos económicos, financieros, sobre todo en los barcos medianos y pequeños que no pueden competir con toda la tecnología que tienen los barcos de mayor tamaño.
El Ecuador está de acuerdo con que exista este plan y lo hemos venido impulsando en los últimos dos o tres años, por lo que esperamos que lo que están diseñando los consultores tenga los mejores criterios, a fin de discutirlo en las reuniones técnicas de agosto.
“Si en estas reuniones de los grupos de trabajo hay un acuerdo, lo pasaríamos a la reunión política para poder analizarlo y ver si este año podemos contar ya con un plan de gestión. En todo caso si no se lo logra este año, la idea es seguir revisando y trabajando hasta que se lo adopte, a fin de controlar la capacidad o el exceso de capacidad y evitar a futuro un impacto negativo en la operación de la flota y en toda la cadena de la industria atunera”, concluye Guillermo Morán.
